Cuando necesitas limpiar algo, sueles pensar que cuanto más rápida sea la acción del producto que utilices, mejor será la limpieza. Sin embargo, tendemos a subestimar los efectos tóxicos de los productos químicos que utilizamos.
En este artículo te explicaremos cómo limpiar el horno de forma natural , evitando productos químicos que, además de poner en peligro nuestra salud, acaban contaminando el medio ambiente.
Necesitarás: agua, una botella con atomizador, una toallita, 1/2 taza de bicarbonato de sodio, vinagre, un recipiente pequeño y guantes para limpiar.
El vinagre es excelente para desinfectar, desengrasar, eliminar manchas, olores y óxido. El bicarbonato de sodio neutraliza los olores y es muy económico.
Parte 1: el interior del horno
Retire las parrillas internas del horno. Mezcla el bicarbonato de sodio con un poco de agua hasta obtener una consistencia casi cremosa. Usando guantes, distribuya esta solución por toda la superficie interna del horno, especialmente en las áreas más sucias. El bicarbonato de sodio tomará un color marrón. Déjala reposar durante 12 horas seguidas para que actúe correctamente.
Una vez que haya pasado este período de tiempo, use un paño húmedo para eliminar la mayor cantidad posible de bicarbonato de sodio ahora seco. Luego, aplica un poco de vinagre con una botella de spray, especialmente en las áreas donde no has podido quitar el bicarbonato de sodio. Se formará una espuma, que retirarás con el paño húmedo. Repita hasta que el horno esté completamente limpio.
Póngalo a temperatura baja durante unos 15 minutos, para que se seque.
Parte 2: la ventana
Aplique la misma solución de bicarbonato de sodio y agua en toda la ventana del horno, espere 30 segundos y luego retírela con un paño húmedo.
