¡A veces es difícil cuidar su hogar sin recurrir a productos químicos comprados en tiendas! A partir de ahora ya no tendrás que comprarlos y podrás utilizar ingredientes naturales al alcance de la cocina con múltiples usos para tu hogar. Aquí hay algunos consejos de sal para ayudarlo a limpiar su interior.
¡Gracias a estos trucos de la sal, verás que limpiar nunca ha sido tan fácil !

Inicio Consejos: ¿Cómo te ayuda la sal?
Algunas tareas pueden ser aburridas y puedes posponer la limpieza de tu casa varias veces a la semana.
Sin embargo, es recomendable programar una hora específica del día en la que limpiarás, porque una casa limpia y organizada mejora tu estado de ánimo.
La sal puede hacer muchas cosas en la casa , aunque la mayoría solo la usa para cocinar. Es un ingrediente de limpieza totalmente natural y muy económico que usaban nuestras abuelas. Pocas personas lo saben, pero puedes usarlo para limpiar tus tuberías.
Debe verter regularmente una solución de medio balde de agua tibia y media taza de sal en el fregadero de la cocina. Esto evita que la grasa se acumule en el desagüe después de lavar los platos. También puedes desodorizar el lavabo con este sencillo gesto.

¿Cómo puedes seguir usándolo?
Para limpiar el vino tinto de alfombras o sofás
Otro consejo será de gran ayuda para quienes beben vino tinto habitualmente. La sal tiene una gran propiedad absorbente y la próxima vez que alguien derrame vino tinto sobre la alfombra o el sofá , busca rápidamente en la cocina.
Limpie el área afectada con una toalla de papel o un paño de algodón después de rociar con una pizca de sal. Dejar actuar 10 minutos y quitar la mancha con agua y jabón. Recuerda que el consumo de alcohol es perjudicial para la salud.
Para quitar la grasa de la sartén.
La sal es poderosa para quitar la grasa de una sartén. Simplemente rocíalo sobre el área grasosa y déjalo reposar por unos minutos. A continuación, deberá frotar bien con una esponja y un poco de jabón para platos antes de enjuagar.
Este ingrediente también limpia artículos de latón y cobre. Mezcle partes iguales de sal y vinagre blanco o jugo de limón para hacer una pasta. Frote suavemente este último sobre las superficies afectadas y déjelo actuar durante una hora, luego seque todo con un paño suave.