Siempre que limpiamos, es fundamental quitar todo el polvo. Porque es un auténtico nido de bacterias, microbios y ácaros, responsables de alergias y otros problemas respiratorios. Desafortunadamente, a pesar de todos los mejores esfuerzos, reaparece casi al instante. ¡Un verdadero círculo infernal!

Si  no existen soluciones definitivas contra su aparición,  existen sin embargo algunas  precauciones a tomar a diario  y buenos reflejos a tener para evitar que se acumule polvo por toda la casa. 

Descubre en este artículo algunos hábitos a adoptar  para evitar que se forme polvo en los rincones de casa.

radiador limpio

limpiar los radiadores

Durante el invierno, los radiadores están encendidos durante mucho tiempo durante el día para mantenernos calientes. ¡El problema es que tienden a proliferar una gran cantidad de polvo! De hecho, el calor que desprenden hace que las partículas de polvo se eleven y se esparzan por todo el entorno.

Por este motivo, le recomendamos que sea especialmente minucioso en la limpieza de los radiadores y que adopte  métodos de lavado profundo al menos una vez al mes .

purificar el aire

Si tiene purificadores de aire, úselos con frecuencia. Te permitirán atrapar el polvo y darle al ambiente un aire mucho más limpio y saludable. Si no tienes un purificador, simplemente ventila las habitaciones al menos 15 minutos al día, especialmente antes de hacer la cama.

Limpia las esquinas

Considere limpiar las esquinas específicamente al menos una vez por semana en toda la casa. Para ello, puedes utilizar un cepillo de dientes con cerdas suaves para profundizar y eliminar todas las manchas de forma eficaz.

También es fundamental el lavado frecuente del suelo de la casa, sobre todo en las estancias más utilizadas de la casa, como el comedor, el baño o la cocina.

cambio de sábanas

Cambia las sábanas

¡El cambio de ropa de cama es fundamental para evitar la acumulación de polvo! Como todos sabemos, dormir con sábanas más de una semana no es bueno, así que sacude la colcha todos los días y  cambia toda la ropa de cama al menos una vez a la semana . Es un hábito que debes adoptar absolutamente para evitar la formación de polvo y, por lo tanto, de ácaros, desencadenantes de alergias crónicas.

Dicho esto, el cambio de mantas y edredones se puede hacer con menos frecuencia. ¡Sin embargo, le recomendamos que aspire regularmente con una boquilla especial para eliminar el polvo!

ordenar la casa 

¡Cuanto más desordenado esté su interior con elementos, más polvo se acumulará! Una casa ordenada y despejada necesariamente mantendrá alejados a los gérmenes. Además, si tus piezas están ordenadas, también podrás limpiarlas más fácil y rápidamente.

Para ello, al menos una vez a la semana, date tiempo para ordenar los dormitorios, el salón y la cocina. Piensa también en poner orden en todas las alacenas, cajones, muebles de cocina y baños.

desempolvar

Consejos para desempolvar

Si la limpieza de la casa se puede hacer cada dos días,  ¡ el desempolvado debe ser más bien diario  !

Porque el polvo se forma muy rápidamente. Por eso es necesario tomarse su tiempo para desempolvar bien la casa, especialmente en los rincones donde la limpieza es más laboriosa, como los del techo o detrás de los muebles.

Advertencia

Para preservar tu salud, te recordamos que es fundamental seguir todos estos consejos para mantener tu interior limpio y libre de polvo.